POEMA DE UN BERRETÍN NOCHERO
(A Gerardo Quilici, su Quijote)
- Se encanuta pa´ fajarse su mancuse
en una
misa rea de bandolas...
Cuando se urna la tarde con
su espiante
Y se amuran en mutis las
esquinas
Vendrá, con su percal y en
las glicinas,
La noche bien catriela y palpitante,
Y en su neura secreta, el
laburante,
Que al nochero extramuro se
encamina,
Sabrá que hay un hastío en
su rutina
Y el destino secreto de un
yugante.
Sanateando, entonces, su
sabiola
Hará su misa rea en la
fonola
Oyéndolo a Gardel, como en
un cuento...
- Y es allí que Gerardo le
propone
Un aliño canyengue de
emociones
Pa´ enlunarle de grillos el
convento;
Con las notas que enhebran
sentimientos
En zurdera y tenaz musiquería,
Y en rubatos de gran
polentería
Cuando el Gordo se enfuella
en su instrumento;
Y en sencillo gutén, sin
espamento
Con aroma a jazmín, sin
taquerías,
Rodarán con
Mancusando berlinas en el
viento.
-
Porque es radio de ley en cada noche
Sin estrilos ni duendes, ni
fantoches,
Ni en crespones de reas
mishiaduras
Que Gerardo hará el
rosariegazo:
Yirando cada disco, faso en
faso
Y a Malena cantando su
ternura.
Letra : Armando Del Fabro
Música : ---
Extraído del libro “De rechifles, balurdos y macanas” de Armando Del Fabro
Cromográfica SRL Ediciones, Rosario,
Agosto de 2000.
(colaboración enviada por el amigo
Lautaro Kaller. 09-2010)