HERMANO CIGARRILLO
(poema)
Te
conocí hace mucho, desde cuando era pendejo
Y
a escondidas de los viejos junto con mis amigos,
A
pitarte aprendimos quizás, por curiosidad,
Y
allí estuvo en verdad el misterio de la cosa
Que
mágica y voluptuosa se transformó en realidad...
Al
tenerte que dejar se hizo paciente tu espera
Acechando
mi flojera por volver a las andadas,
Y
me banco la parada pues, no quisiera transar,
Envuelto
en el espiral quemando el humo mis ojos
Aunque
sabés que mi antojo es más frágil y venal...
Mucho
costó abandonar un vicio como el tabaco
Y
pensarás en el flaco favor que me estoy haciendo,
Pues,
creéme te comprendo, no fue fácil rechazarte,
Así
porque sí olvidarte después que anduvimos juntos
Hermano,
ya era difunto por poco no me mataste...
Tampoco
olvido las tardes que parado en una esquina
Mientras
esperaba la mina vos la pata me hiciste,
Y
además testigo fuiste de memorables jornadas,
Tangos,
fútbol, escolaseada en Palermo y San Isidro
Y
en el Luna era un delirio cuando Gatica peleaba...
Pucho,
faso, pitillo y qué sé yo cuántos nombres
Te
pusimos los hombres para honrarte en abolengo,
Y
aunque uno ande enfermo por consumirte en vida,
Habrá
una llama encendida en la punta de la cerilla
Siendo
esa luz que brilla al emprender la partida.
Letra : Osvaldo
France (Osvaldo Francella)
Música : ---
(colaboración enviada
por su autor, el amigo Osvaldo Francella. 02-2016)