AL
COMPÁS DE UN 2 POR 4
Fue mi sueño conocerla y expresarle mi cariño
Me propuse conquistarla con empeño y con amor,
Algo bueno vi en sus ojos, tan sinceros como un niño
Risa suave y cristalina sobre un rostro juguetón.
Pero a ella le atraía con pasión la “nueva ola”
Entre ritmos dislocados mi pronóstico se dio,
Fue cediendo poco a poco al encanto de “un Arolas”
Y al compás de un dos por cuatro me entregó su corazón.
Querida...
Cuánto amor hay en tus ojos,
Si supieras lo dichoso
Que es vivir pensando en ti...
Cariño
Como el nuestro hay uno solo,
El tenerte es un tesoro
Que aprisiono junto a mí.
Querida...
Mi alegría es infinita
Porque pude, muchachita
Deshacer esa pasión...
Logrando
Que volcaras tu entusiasmo
Y sintieras por el tango
¡Este amor que siento yo!
Al cantar con alegría el pasaje más hermoso
De mi vida de muchacho soñador y sin revés,
Quiero hablar con los varones que se dan con esos mozos
Que hoy inventan “nuevas olas” sin saber ya lo que hacer.
Este suelo que llamamos, con orgullo, Buenos Aires
No merece los desaires de unas pibas sin razón,
Empuñemos nuestras armas, con paciencia y sin alarde
Pa´ que sea nuestro tango el que talle en el salón...!
Letra : Roberto Vidal
Música : Vicente San Lorenzo (Vicente Ronca)