ADORACIÓN (IV)
En
alas del ensueño voló mi fantasía
En
busca de la dicha que mi mente soñó,
Y
allá en el infinito, hallé la amada mía
Que
ansiosa de cariño, por aquel amor juró.
Qué
bella es la vida
Cuando
se siente amado,
Dichoso
es el destino
Que
ignora el dolor.
Si
mi dicha es un sueño
Sueño
de enamorado,
Quisiera
para siempre
Jamás
despertar.
Las
horas de la tarde se mueren lentamente
Crepúsculo
divino de bello atardecer,
Las
flores en silencio se inclinan dulcemente
Y
aguardan temblorosas el nuevo amanecer.
Así
como esas flores
Mi
alma se entristece,
De
pronto falta en ella
Calor
de tu mirar.
Hermosa
reina mía
Sin
ti todo oscurece,
Es
una eterna noche
Un
eterno llorar.
Letra y música : Eduardo
Bianco (Eduardo Vicente Bianco)
Grabado por la orquesta
de Eduardo Bianco con la voz de Manuel Bianco (Eduardo Bianco). (sello Odeón N°
165.402, París, 1928)
(letra obtenida de la
grabación)