RÉQUIEM PARA UN TIEMPO NIÑO
Era el tiempo singular
De andar por los rincones y
jugar,
De hablar con personajes
inventados y saberse
Monarca de una tibia
soledad...
Un pianito de salón,
Muñecos de cartón
Y el clásico botar de una
pelota.
La guitarrita con dos
cuerdas rotas,
Y guardado en un cajón, el
“meccano”
Con su magia de metal...
Después...
Crecimos sin piedad
Y toda la verdad fue un
paso inevitable.
Supimos que la vida era otra
cosa,
Tuvimos
experiencias dolorosas,
Y vestimos con tristeza
Una piel de realidad... que
no era rosa...
Y hoy somos hasta el fin
Adultos sin misterios del
pasado,
El tiempo de los juegos se
ha gastado
Y el niño que soñaba... ya
no está...
Como barco de papel
El tiempo de los juegos se
nos fue,
Nostalgia de almanaques
amarillos por los años...
¡Pensar que alguna vez
tuvimos diez!...
Empujados
a vivir,
Tenemos que fingir
Que aquello es un asunto
terminado...
Pero de a ratos se nos ve
el pasado,
Al mirar a un chiquilín
Dibujar un monigote en la
pared...
Letra y música
: Mario Iaquinandi (Alfredo Mario
Iaquinandi)