ALMA DE MILONGA

 

 

 

Por castigar la audacia, del reo aquel

Que quería robarme tu corazón,

Una noche terrible, yo lo esperé

Escondido en las sombras del callejón.

Cuando estuvo a mi lado, me le acerqué

Y quise reprocharle su mala acción,

Contestó sonriendo, yo no sé qué

Y le crucé la cara con mi facón.

 

Estoy en la cana, encerrado

Llorando rabia y dolor,

Al ver que te has olvidado

De que vos fuiste, mi perdición.

Ya sé que te andás floreando

Por las milongas, con él,

Mas no importa, ya la irás pagando

Que todo se paga, ya lo vas a ver.

 

No tenés sentimientos, ni corazón

Para vos es lo mismo, cualquier bacán,

En tu alma de milonga, no hay emoción

Y tus penas se ahogan con un gotán.

Por hacerme a tus ojos, digno de vos

Me jugué la parada, no me eché atrás,

Tenés alma de fiera, tan perra sos

Que me ves encanado y así pagás.

 

Pero no importa, estas rejas

Algún día se abrirán,

Y se acabarán mis quejas

Y tus paradas, se acabarán.

Escuchá lo que te digo

Y esto, ya vos lo sabés,

Yo te juro, que en cuanto me larguen

Te corto la cara, pa´ que te acordés.

 

Letra y música : Francisco Álvarez

 

Grabado por Rosita Quiroga con acompañamiento de guitarras. (sello RCA, 07-04-1925)

 

 

(colaboración enviada por el amigo Carlos de Flores. 05-2008)

 

 

AtrásMenú Principal