ADORACIÓN
(II)
(vals)
La noche que la vi, por
primera vez,
Yo en mi alma sentí, las
ansias del querer.
Un beso le pedí, que en sus
labios estampé,
Y por tiempo me quedó dulce
sabor de miel.
Lazo de rosas fue con que
me ató
En la copa del placer, mi
ser embriagó.
Cuando yo la besé, sus
labios divinos
Dijeron: “A ti adoraré...”
Amor... ¡Oh, gran placer!
Que nos da en el vivir,
ansias de un querer.
Teniendo una mujer a quien
amar
Y el corazón haga
palpitar...
Gozar... supremo don
Que el cielo nos brindó en
forma de amor.
Siempre te adoraré, mi
diosa querida
Tú fuiste mi vida y sólo a
ti amé.
Cantemos juntos la canción,
Los labios unidos con
fervor,
Los corazones con amor
Entonen himnos de pasión.
No hay por qué temer ya el
dolor
Porque en la senda hemos de
seguir,
Y unidos siempre juntitos
los dos
Así es como deseo yo
morir...
Cantemos juntos la canción,
Los labios unidos con
fervor,
Los corazones con amor
Entonen himnos de pasión.
Y nuestros corazones con
fruición
Al entonar el himno del
amor,
Repetirán con esperanza y
fe
Que: “Siempre a ti yo
adoraré.”
Letra :
Alfonso Giménez
Música :
Niels Jorge Paulos
Grabado
por la orquesta de Antonio Bonavena con la voz de Antonio Buglione.